Santa Rosa.- La mañana de hoy fue distinta en el Hospital Santa Teresita. Un ambiente de tensión y cansancio se apoderó del personal médico, administrativo y operativo.Esto porque decidió salir a las afueras del centro de salud para protagonizar un plantón pacífico, en el que exigieron acciones urgentes ante la crítica situación que atraviesa esta institución de atención pública.
Con carteles en mano y rostros visiblemente agotados, los trabajadores alzaron la voz para denunciar una serie de falencias estructurales y operativas que, aseguran, afectan tanto a los profesionales que prestan servicios como a los pacientes que acuden en busca de atención médica.
“Estamos abandonados, sin recursos para trabajar, y la comunidad sufre las consecuencias”, expresó uno de los manifestantes, con tono de indignación.
Entre las principales problemáticas denunciadas por los trabajadores está la escasez de medicamentos esenciales, lo que impide brindar tratamientos adecuados a los pacientes.
En algunos casos, las recetas entregadas por los médicos no pueden ser surtidas, porque las bodegas del hospital están prácticamente vacías.
La situación se agrava cuando se trata de emergencias. Según se reveló durante la protesta, las ambulancias del hospital no cuentan con el combustible suficiente para atender traslados urgentes, debido a la falta de provisión de gasolina. A esto se suma el mal estado mecánico de los vehículos, muchos de los cuales presentan desperfectos acumulados por falta de mantenimiento.
La protesta también puso sobre la mesa otro problema silencioso pero crítico: la falta de insumos básicos de limpieza, lo que compromete la salubridad de las instalaciones hospitalarias.
Sin los materiales necesarios, es imposible garantizar entornos seguros y libres de contaminación, tanto para el personal como para los pacientes internados.
Pero quizá uno de los aspectos más alarmantes señalados por los manifestantes es el atraso en el pago de sueldos, una situación que lleva varios meses acumulándose.
Médicos, enfermeras, camilleros, personal de limpieza y administrativos denuncian que no han recibido sus remuneraciones, lo que ha generado graves consecuencias económicas en sus hogares.
“Tenemos que venir a trabajar sin saber cómo llegaremos a fin de mes. Muchos de nosotros ya no podemos pagar ni el transporte para llegar al hospital. Es inhumano”, sostuvo otro de los trabajadores durante el plantón.
La falta de pagos no solo afecta al personal, sino que también ha provocado la renuncia de varios profesionales, quienes han buscado empleo en el sector privado o en otras provincias, agravando así el déficit de recursos humanos en la casa de salud.
“Nos duele ver cómo los doctores hacen todo lo que pueden, pero no tienen herramientas para trabajar. Esto es un abandono total del Estado”, comentó Mariana C., familiar de una paciente internada.
Los manifestantes hicieron un llamado urgente a las autoridades locales, a la Coordinación Zonal de Salud y al Ministerio de Salud Pública, para que atiendan esta situación antes de que colapse completamente el sistema de atención en el Hospital Santa Teresita.
Exigen la dotación inmediata de insumos, medicamentos, combustible, mantenimiento para ambulancias y el pago de sueldos atrasados, así como una solución estructural que garantice condiciones dignas para el personal y los pacientes.
La protesta concluyó de forma pacífica, pero el mensaje fue claro: la salud pública está en riesgo, y sin una respuesta estatal oportuna, las consecuencias podrían ser irreparables.































